En un salón de clases asistían 4 niños, María, Pedro, Luisa y Pablo, cursaban el 5to año de primaria y cada que la maestra daba un tema, siempre decía. ¿Quién es el más inteligente? que pase al frente. Un día le preguntaron a la maestra quien era el mejor de su clase y a su mente se le vieron los siguientes nombres, María era la típica niña que siempre quería participar, muy simpática. Pedro era el niño que sacaba 10 en casi todo, pero si le preguntabas en público no contestaba porque prefería trabajar solo y Pablo era el niño que siempre cumplía con todo, con el uniforme impecable, estudioso a más no poder y siempre preocupado por los detalles.
Por otro lado, estaba Luisa una niña de calificaciones promedio que siempre tenía 8 en matemáticas y no tenía las mejores habilidades físicas, pero jugaba en el equipo de voleibol. Luisa era una niña con una gran voluntad de esforzarse y una gran sonrisa.
A la hora de vivir un proceso de reclutamiento nos volvemos la maestra en el salón de clases preguntándonos ¿Quién es el mejor para el puesto?
Cada empresa y persona le da un significado propio al concepto de “mejor” o de “inteligencia”. Y así empieza la odisea de la detección de talento. No tenemos que vivir esta búsqueda solos, siempre será mejor ir acompañados. En Partners no puedo prometerte que encontraré al candidato perfecto o al mejor del mundo porque mentiría, la perfección es relativa y subjetiva. Lo que sí podemos hacer es acompañarte a entender el mercado de talento actual de las diferentes generaciones y regiones, a construir juntos mecanismos de atracción de talento para que en equipo encontremos el talento que hoy te puede sumar y resolver.
Es muy común pensar en perfiles “genios” cuando pensamos en quién nos gustaría que trabajara en nuestras empresas, sin embargo recordemos que también existen personas con voluntad y disciplina que pueden funcionar muy bien aplicando sus competencias..
En tu empresa y en muchos lugares hay talentos que a veces no nos damos la oportunidad de ver y que podrían hacer la diferencia sin necesidad de ser un perfil genio, quizás es solo cuestión de observarlos con otra perspectiva.
¡Sonríe!
Paty Vargas.