El desarrollo profesional de una mujer con hijos se topa con la crianza, y es ahí cuando se vuelve todo un desafío constante, lograr equilibrar la vida laboral con la familiar. Es una costumbre latente poner sobre la figura de una mujer la responsabilidad casi completa del cuidado y educación de los hijos, así como la de administración del hogar entre otras funciones de asistencia y de resoluciones diversas, en la actualidad ya no es una elección, las mujeres con hijos buscan incorporarse a la vida laboral no sólo por satisfacción profesional, sino también porque necesitan el ingreso.
En los últimos 8 años el número de madres trabajadoras ha venido en ascenso con un incremento aproximado del 25% hasta antes del 2020, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, durante 2020 se reportó una baja de la fuerza laboral femenina debido a que sus circunstancias relacionadas con la crianza y la asistencia prestada a algún familiar las llevaron tomar la decisión de retirarse de la vida laboral.
Lo llamo doble desafío porque las Empresas debemos encontrar el equilibrio organizacional al incluir en nuestro plan estratégico, políticas que incluyan programas dirigidos apoyar la maternidad, el cuidado de los hijos, el trabajo flexible y el uso de la tecnología, para aquellas colaboradoras que están en su etapa de crianza de tal forma que nos convirtamos en un apoyo y no un obstáculo, buscando cómo potencializar su talento creando las condiciones laborales adecuadas para que la mujer con hijos pueda cubrir lo más satisfactoriamente todos sus roles de vida ya que ser madre e ir a trabajar no debería de ser proyectos enfrentados. Con este nuevo enfoque se busca generar círculos de lealtad y entornos de trabajo virtuosos, en donde sin duda gana la persona, la empresa y la comunidad.
No sólo las empresas deben de reflexionar que el verdadero desafío viene cuando nosotras como mujeres también comprendemos que necesitamos salir de la pasividad y hacernos cargo, aprender a tomar decisiones sin culpa; significa comprender que no podemos estar en dos lados a la vez y que tenemos que decidir y comunicar claramente cuando no podemos estar, se trata de marcar límites, ajustar el plan y buscar ese escenario que nos permita dar un resultado óptimo laboral sin descuidar a la familia. A veces pensamos que se necesita mucho para llegar al nivel de empresas con programas destinados a este fin, pero no es así, es cuestión de querer marcar la diferencia, encontrar la empatía y actuar, tal es el caso de Cop (Centro de Oncología Personalizada), orgullosamente «culichi», que durante la pandemia abrió un espacio destinado a los hijos de los colaboradores, un proyecto que llegó para quedarse, incluyendo políticas de trabajo flexible. Sin duda un buen lugar para laborar.
Me encantaría que me compartas tu desafío en la búsqueda de conciliar tu vida laboral y familiar.
Les comparto una lista de películas que seguro te recordarán a alguien.